paro de transporte en FranciaUn nuevo paro de transporte inició este miércoles en Francia, en protesta por en las pretensiones del gobierno del presidente Nicolás Sarkozy de reformar los regímenes especiales de pensiones.
Por segunda vez en menos de un mes, las principales ciudades de Francia amanecieron paralizadas con una escasa circulación de trenes y con fuertes congestionamientos vehiculares por parte de quienes decidieron utilizar sus automóviles para no verse afectados con la falta de transporte.

La Sociedad Nacional de Ferrocarriles (SNCF) confirmó la mañana de este miércoles que el tráfico en su red estaba "muy perturbado" y que durante toda la jornada se esperaba que circularan sólo entre 20 y el 25 por ciento de los trenes.

La circulación de metros, autobuses y tranvías en la región de París también estaba muy afectada desde primera hora de la mañana, debido a que el paro también repercutía en la compañía del transporte metropolitano RATP.

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    Las calles de París también sufrieron fuertes estancamientos en calles y avenidas, debido a quienes optaron por el automóvil, mientras que otros utilizaron métodos alternativos como las bicicletas, que este miércoles se ven en las calles más de lo habitual, caminar o recurrir a conocidos que tengan carro.

    La huelga, la segunda que se produce en menos de un mes, se realiza para rechazar la reforma de los regímenes especiales de jubilación, que busca aumentar de 37,5 a 40 años el tiempo de las cotizaciones de empleados del transporte público, la compañía de ferrocarriles, las empresas de energía y hasta a los secretarios de notarías, para obtener su jubilación.

    De los regímenes especiales se benefician alrededor de medio millón de trabajadores, principalmente de la SNCF, la RATP, las empresas energéticas (como EDF y GDF) o los secretarios de notaría.

    Aunque en principio la huelga fue convocada por el sindicato de ferrocarriles SNCF, a la protesta se han unido los trabajadores del transporte público de metro, buses, tranvías y trenes suburbanos de la región parisina, además de los empleados de las también estatales empresas de electricidad (EDF) y de gas (GDF).

    El ministro francés de Trabajo, Xavier Bertrand, se encuentra reunido con los sindicatos convocantes del paro, que en planea extenderse hasta la semana entrante, para alcanzar un acuerdo que permita la suspensión de las paralizaciones que el pasado 18 de octubre tuvo éxito rotundo.